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El lobby alimentario se disfraza de bio

Merxe Morales

Creado por Merxe Morales

Los productos ecológicos no son perfectos. Hay formulaciones en alimentos procesados bio  que no están al cien por cien equilibrados. Algunos tienen demasiadas grasas (aunque sean de origen orgánico)  son grasas, llevan  aceite de palma, harinas refinadas, demasiado azúcar…
Pero lo que nunca habíamos visto hasta ahora en un herbolario o en una tienda de alimentos saludables es la venta de azúcar blanco. Nunca. Es un producto impensable. Descartado de las despensas de los que buscan salud.
Y lo ha tenido que lanzar la empresa Azucarera.  Bajo mi punto de vista porque hay una enorme confusión de conceptos.

El consumidor ecológico no quiere azúcar blanco.

¿O es que por ponerle la etiqueta  ecológica se bendice al azúcar refinado?  Sigue siendo una sustancia adictiva, con un peligroso  índice glucémico de 60 y 0% minerales,  vitaminas y nutrientes.

Como dice el Doctor Mercola: “La muerte a causa del azúcar podría no ser una exageración. Hay evidencias que sugieren que el azúcar es un FACTOR PRINCIPAL en enfermedades crónicas y obesidad”.

El azúcar es un producto adictivo de uso común que alimenta las células del cáncer, desencadena el aumento de peso y promueve el envejecimiento prematuro.

Aquí podéis ver el artículo completo del Doctor Mercola con los 76 principales peligros que conlleva su consumo. 

Y esto está pasando porque la gran industria alimentaria convencional, que hasta ahora ha demostrado estar poco preocupada por la salud de los consumidores (podemos listas miles de productos poco o nada respetuosos con la salud) está entrando en el mercado ecológico lanzando sus propios aceites, cereales, galletas, mermeladas o panes.

Pero ¿se producen bajo el mismo concepto?

¿Qué conciencia hay detrás de una empresa que fabrica azúcar blanco ecológico cuando hasta la propia Organización Mundial de la Salud insta a reducir su consumo?

¿Qué sentido tiene poner en los lienales BIO este producto?

Sembrará confusión entre algunos. Y unos pocos lo llevarán a su cesta de la compra. Pero no serán los consumidores informados.

Y ya tengo una buena lista de productos ecológicos lanzados por SOS, La Masía, Gullón, Hero, Dulcesol...  Os los voy a compartir aquí mismo

¿Qué os parece que los grandes de la alimentación empiecen a producir ecológico? ¿Os da la misma confianza? Me interesa mucho lo que pensáis sobre esto.

 

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Descubre cómo ‘envenenan’ la comida española

En concreto, el informe centra el análisis en un tipo de plaguicidas, los contaminantes hormonales (también conocidos como disruptores endocrinos o EDC), con capacidad de alterar el funcionamiento normal del sistema hormonal tanto de seres humanos como de animales.
Los plaguicidas contaminantes hormonales presentes en los alimentos exponen a la población a un peligroso cóctel de tóxicos que diversos estudios científicos relacionan con daños en la salud humana. El 28% de las productos analizados tienen residuos de plaguicidas. El porcentaje aumenta hasta el 45% en frutas y verduras. Los Estados europeos votan durante estas semanas una propuesta de la Comisión Europea que puede permitir la presencia de contaminantes hormonales en los plaguicidas. [Informe] Directo a tus hormonas El informe ’Directo a tus hormonas. Guía de alimentos disruptores’ que presenta Ecologistas en Acción analiza datos oficiales de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) para alertar del peligro que supone la exposición de la población española a plaguicidas a través de la alimentación. En concreto, el informe centra el análisis en un tipo de plaguicidas, los contaminantes hormonales (también conocidos como disruptores endocrinos o EDC), con capacidad de alterar el funcionamiento normal del sistema hormonal tanto de seres humanos como de animales. La guía elabora una lista de los 10 alimentos más contaminados. Las peras, con 16 plaguicidas EDC, ocupan el primer puesto. La exposición de la población a estos tóxicos se relaciona con enfermedades y daños en la salud cuya incidencia ha crecido en las últimas décadas como pérdida de fertilidad, malformaciones congénitas, diabetes, obesidad, daños en el sistema inmune, autismo, síndrome de hiperactividad y diversos tipos de cáncer como el de mama, próstata, testículos o tiroides. La legislación actual, que permite la presencia de plaguicidas por debajo de un límite de residuo por alimento, es inadecuada para los contaminantes hormonales. Cualquier mínima cantidad entraña un peligro, que puede multiplicarse por la acción combinada de las decenas de plaguicidas encontrados por el análisis. Por esta razón, el Reglamento Europeo 1107/2009 prohíbe expresamente el uso de plaguicidas que puedan afectar al sistema hormonal. Sin embargo, esta prohibición no se ha aplicado, porque la Comisión Europea no ha elaborado criterios legales para la identificación de los contaminantes hormonales. El lanzamiento del informe coincide con la discusión en Bruselas de una propuesta de definición de contaminantes hormonales que ha recibido duras críticas de la comunidad científica, de organizaciones para el cuidado de la salud y el medio ambiente y de países como Suecia, Dinamarca y Francia. Ecologistas en Acción considera necesario que los representantes del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente se opongan a la propuesta de la Comisión Europea y den un paso al frente para proteger la salud de su población, prohibiendo los plaguicidas que puedan alterar el sistema hormonal.

http://www.ecologistasenaccion.org/IMG/pdf/informe-plaguicidas-2016.pdf

Fuente:http://www.ecologistasenaccion.org/

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12 aditivos alimentarios con los que conviene tener cuidado

Los aditivos están más presentes de lo que nosotros creemos en los productos que consumimos habitualmente. A corto plazo, el daño no es visible, pero a largo plazo, su consumo puede resultar perjudicial. Por eso, es mejor sustituir los alimentos más procesados de nuestra dieta diaria por alimentos frescos y ecológicos. A continuación, os dejamos con una lista de los aditivos más perjudiciales para el cuerpo humano y que consumimos habitualmente, sin darnos cuenta.

CHICKLES

  • Nitratos y nitritos: son agentes que se utilizan como colorantes y saborizantes. También alargan la vida útil del producto más de lo que resulta natural. Es frecuente que se añadan a productos cárnicos. ¿Cómo actúan? Los nitritos reacciona de forma natural ante las arninas (proteínas). Esta reacción provoca la formación de nitrosaminas, que tienen acción carcinógena. Los nitritos están asociados al cáncer de estómago, esófago, cerebro y tiroides.
  • Bromato de potasio: se usa en la elaboración de panes y otros productos de panadería y pastelería para ayudar a subir la masa durante su horneado. Está listado como carcinógeno y prohibido en algunos pases. Puede causar tumores, toxicidad en los riñones y dañar nuestro ADN.
  • Propilparabeno: es un disruptivo endocrino que causa daños graves en nuestras hormonas. El propilparabeno actúa en nuestro cuerpo como un estrógeno sintético. Es capaz de alterar los genes, inclusive las células del cáncer de mama. El propilparabeno acelera el crecimiento de las células tumorales de las mamas. También está asociado con la infertilidad de las mujeres. Este parabeno se utiliza en la elaboración de tortillas, magdalenas o muffins, productos lácteos y bebidas.
  • Butirato de hidroxianisol: está clasificado como carcinógeno y en pruebas con animales ha causado diferentes tipos de tumores. También está clasificado como un disruptor endocrino. Baja los niveles de testosterona y de la hormona tiroxina. Afecta perjudicialmente al esperma y a los órganos reproductores. Se encuentra en carnes, patatas fritas y como saborizante en diferentes productos.
  • Propilgalato: se utiliza como conservante en productos de alto contenido en grasas. Como disruptor endocrino puede afectar a la actividad estrógena.
  • Teobromina: es un alcaloide que se encuentra de forma natural en el cacao y tiene un efecto similar a la cafeína. Se utiliza en productos como el pan, los cereales o las bebidas deportivas. Afecta al aparato reproductor y genera problemas en el desarrollo.
  • Saborizantes: suelen aparecer nombrados en las etiquetas de los productos bien como saborizante o bien como sabor o aroma natural. Están en más de 80.000 productos alimentarios. En un solo producto, puede haber hasta más de 100 saborizantes diferentes. Ese saborizante natural que aparece en la etiqueta contiene agentes químicos sintéticos como propilenoglicol o BHA.
  • Colorantes artificiales: el objetivo es que los productos sean más atractivos para la vista de los consumidores. No añaden ningún valor nutricional. Pueden causar tumores, contaminación por los furanos, asociados al cáncer. Los colorantes afectan a la hiperactividad de los niños y a la falta de atención
  • Diacetilo: se utiliza para dar sabor a las palomitas con mantequilla de microondas. Esta asociado a daños en los pulmones, en concreto bronquiolitis obliterante, que produce una inflamación crónica de las vías respiratorias.
  • Fosfatos: son uno de los aditivos más utilizados. Aparece en más de 20.000 productos y están asociados a problemas cardiovasculares.
  • Aluminio: este agente se acumula en nuestro cuerpo, principalmente en los huesos. El aluminio se usa en la industria como estabilizar que pueden provocar cambios neurológicos como alteraciones del comportamiento, dificultades en el aprendizaje o en la respuesta motora.

Estos aditivos aparecen sobre todo en los productos más procesados y elaborados como bollería, galletas o carnes y comidas preparadas.

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